domingo, 17 de febrero de 2013

Estaba pensando en una amiga. Bueno, no sé si esa definición es la que más se ajusta a la relación que me une a ella. Digamos que se ha quedado en una persona conocida con la que tuve un affaire, en tiempos pretéritos tal vez la llamaran amante, hoy, seguramente, una expresión muy soez que no me apetece reproducir. De vez en cuando nos enviamos mensajes para comprobar que seguimos bien, y compartir alguna bibliografía interesante, y poco más. El caso es que me viene a la cabeza pensando en las inmensas capacidades innatas que le adornan. Es fácilmente la persona más culta e inteligente que conozco. Un C.I. que se sale de las tablas unido a un afán de conocimiento y voracidad intelectual tremendos, la convierten en una máquina de pensar precisa cual reloj suizo. Parámetro inteligencia racional, en los Himalaya!! Pero las personas no somos el resultado de un test de capacidades analíticas o matemáticas. Lejos de esa perspectiva, creo que somos la suma de múltiples capacidades compartimentadas y al mismo tiempo complementarias. Y si no, ¿cómo es posible que individuos con un tipo de retraso mental moderado, puedan ser genios de la comunicación verbal, o autistas que no son capaces de una vinculación emocional normal o empalmar dos frases seguidas coherentes, luego sean genios de los números? A lo que iba es que, en esta sociedad medimos absolutamente todo, hasta algo tan, en principio, lejano de una fría cifra como la capacidad de raciocinio de un ser humano. ¿Y que es de la felicidad? ¿cómo se puede constatar empíricamente en una persona ese parámetro? ¿Qué es más importante? ¿Una mente brillante, o una capacidad de sacrificio a prueba de bomba? Si la inteligencia de un ser humano fuera el resultado de sus decisiones vitales, mi "amiga" estaría al nivel de un niño de preescolar . No voy a entrar en detalles, pero, visto desde fuera, diría que está a años luz de ser una persona completa y feliz, lo que puede llevar a entender que es nuestro cerebro límbico, el de las emociones y no el hemisferio izquierdo analítico el que marca la diferencia. En Bután, un país aislado en los Himalaya, sus dirigentes pensaron que la única medida adecuada para ponderar si su trabajo como regidores llegaba a buen fin es el FIB, Felicidad Interior Bruta. ¿Curioso, no?. Poco que ver con los grandes números que sacan los burócratas por estos lares para venderte la idea de que todo va fatal. Allí piensan que lo único importante es si la gente sonríe....me parece alucinante. A ver si alguno toma nota... Mi amiga responde a un tipo de persona que, en mi opinión, se toma demasiado en serio su vida, y la vida en general. Como oí una vez, es de auténtico imbécil tomarte demasiado en serio algo de lo que no vas a salir vivo. Y tiene toda la razón. El mundo es inmensamente mejor cuando está poblado de individuos que son conscientes de que van a morir y que la vida es frágil como una mariposa. El problema es que últimamente estamos rodeados de idiotas que piensan que van a vivir eternamente…

3 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. Me ha gustado mucho tu análisis, llámese amiga pero podría ser cualquier persona de las que pululan ultimamente por nuestro contaminado entorno. Pienso más o menos lo mismo. En nuestra sociedad se valora mucho la inteligencia analítica en detrimento de la emocional (aunque en muchas "companies" te estén vendiendo lo contrario), creo que es fruto de eso, de esta sociedad tan exigente, tan voraz que hace que desde pequeños ya empecemos la cuesta de la competitividad sin límites, porque es así, la sociedad, la economía, las marcas, nos hacen creer que cuanto más "inteligentes" seamos, mas "coquitos" vaya! mejor nos va a ir.. véase aportanción al C.V tan necesaria o Linkedines particulares super completos. ¡Yo hace tiempo que descubrí el pastel compañero! y reaccioné a tiempo, por eso, siempre, siempre me niego, rechazo a que entre una brizna más de "supuesta inteligencia", "falsedad sectaria", llámenlo como quieran e intento dejar más espacio para la vida, las emociones y la humanidad vaya!....¡te lo digo en serio!, tendriamos que aprender mucho de otras culturas que no se toman la vida tan en serio, por referencias me muero de envidia los domingos en CUATRO cuando veo "Palabra de Gitano" y me digo a mí mismo: ...¡que carajo! eso si que es vivir bien!!... a tomar por saco el HEMISFERIO IZQUIERDO!!!!. Don´t you agree?

    ResponderEliminar
  3. Efectivamente.......tu lo sabes bien, que sobre todo cuando llega la family al final lo que cuenta queda cristalino.....todo el tiempo que puedas disfrutar de su compañía y lo que les puedas aportar.....todo lo demás pasa a un segundo plano. La inteligencia es lo que es, una herramienta para ser utilizada correctamente....

    ResponderEliminar